Estudiemos Colosenses (Parte 15)
Los miembros de la nueva sociedad trabajan para la gloria de Dios, sabiendo que, al hacerlo, están reservando una recompensa eterna. Nuestro servicio a la empresa o lugar donde trabajemos es, en una instancia más profunda, un trabajo para el Señor. En este mundo, nuestros amos o jefes pudieran incluso hacernos injusticia al no respetar nuestros derechos, pero debemos tener en cuenta la gran recompensa que tenemos en los cielos y saber que la venganza, en todo caso, es del Señor.