¿Las palabras tienen poder? Una reflexión sobre declarar, decretar y reclamar bendiciones | Evangelio Verdadero

¿Las palabras tienen poder? Una reflexión sobre declarar, decretar y reclamar bendiciones

Es muy popular en las iglesias de hoy la práctica del “Yo declaro” que consiste en afirmar que podemos cambiar nuestra vida si decimos con suficiente fe lo que queremos que nos ocurra. Una versión más moderada es aquella que al menos exige que eso que “declaramos” esté en la Biblia en forma de promesa (aunque sea una mala interpretación del texto, una eisegesis).

Estudiemos Colosenses (Parte 1) | Evangelio Verdadero

Estudiemos Colosenses (Parte 1)

A lo largo de los últimos cinco o seis meses, he estado estudiando constantemente la carta del apóstol Pablo a los Colosenses. Mi interés en ella ha sido producido por un curso de predicación expositiva que mi pastor impartió en nuestra iglesia, y realmente ha sido una tarea muy gratificante, ya que mi entendimiento de la superioridad de Cristo, su obra en la cruz, el evangelio y la nueva vida han sido fortalecidos sobremanera.

Importancia de la unidad en la Iglesia | Evangelio Verdadero

Importancia de la unidad en la Iglesia

Vivimos en un mundo de individualismo y soledad en el que cada quien busca lo suyo. No importa si alguien más sufre, con tal de conseguir nuestro propio “bienestar”. Vemos, por ejemplo, políticos que no se interesan por lo que le sucede al pueblo, mientras ellos anden en sus carros de lujo y tengan grandes mansiones y dinero. Ese es solamente un ejemplo de los tantos casos que podemos ver en el mundo.

Sólo Tú Eres Dios

Aunque para algunos el ritmo es problema, para mí, glorifica a Dios y exalta al Cordero, les dejo la letra de una canción que me gusta mucho, también les adjunto la canción, está en inglés así que les dejo la traducción y también las letras en inglés. “Todas las naciones que hiciste vendrán y adorarán…

Manos Vacías

¿Qué tengo que ofrecer para obtener el perdón de mi Dios? ¿Qué puedo ofrecerle al Creador y Dueño de todo? No poseo nada, soy un mendigo en busca del pan del perdón, sólo puedo venir delante del que es tres veces Santo con manos vacías, aún no puedo ni siquiera traer fe, la fe no…