Por Rebeca Galicia Villagrana
Hace algunos años sostenía una plática con una persona que se hacía llamar ateo, dentro de la conversación que surgía, en torno a convertirse en una discusión de ideas, él me dijo algo particular: ¡La Biblia no es real, Dios no existe! Enseguida le contesté con una pregunta: ¿Has leído la Biblia?, su respuesta obviamente fue no. Y afirmé: Seguramente has usado alguna frase bíblica y ni siquiera lo has notado. Su respuesta fue retadora: ¡Demuéstralo!
¿Cómo puede una persona decir o suponer que algo es real o no cuando no conoce del tema?
Claro es que la persona a referencia tenía una justificación, como dice 1 Corintios 2:14 “Pero el hombre natural no percibe las cosas que son de del Espíritu de Dios, porque para él son locura, y no las puede entender, porque se han de discernir espiritualmente”. Sin embargo, muchos de nosotros, aun cuando conocemos de la Palabra de Dios, somos perezosos en estudiar como deberíamos la Biblia, con constancia y esmero de tal modo que diariamente necesitemos de su lectura hasta convertirlo en un buen hábito que nutrirá nuestro espíritu.
Fue gracias a esta plática que entendí que hay muchas personas que jamás han tenido interés en conocer de este maravilloso Libro, y tal vez lo que necesiten es un pequeño estímulo para ello. Como lo afirmé, diariamente podemos estar usando alguna frase bíblica sin saberlo, y al mismo tiempo creer que la Biblia es un libro religioso y aburrido.
A partir de entonces hubo un antes y un después, y aunque la lectura de la Biblia ha sido una de las actividades diarias en mi familia, me di a la tarea de leerla más, prestando atención a esos detalles, que, aunque escondidos y pequeños, pueden ser significativos y sorprendentes.
Sin embargo; la Biblia no es un libro cualquiera que debas leer por leer, la Biblia es la Palabra escrita de Dios en la que revela su voluntad para con cada uno de nosotros, es una biblioteca de 66 libros escritos por distintos hombres en distintas épocas bajo inspiración divina y preservados en perfecta armonía, de modo que “Toda la Escritura es inspirada por Dios y útil para enseñar, para reprender, para corregir y para instruir en la justicia, a fin de que el siervo de Dios esté enteramente capacitado para toda buena obra” 2 Timoteo 3:16-17 NVI.
No importa que tan joven seas o que tan mayor creas ser, si quieres comenzar a leer la Biblia basta que te lo propongas de todo corazón. A continuación, te daré unos consejos personales para comenzar a hacerlo hoy mismo:
- La Biblia como Palabra de Dios: Una vez que comprendas que este Libro es de inspiración divina, podrás encontrar en cada página enseñanzas para tu vida diaria que te capacitarán en cada aspecto “Lámpara es a mis pies tu Palabra, y lumbrera a mi camino” Salmos 119:105 RVR60.
- Elección de una Biblia: En la actualidad contamos con aproximadamente 3500 traducciones de la Biblia (incluidos dialectos, braille, audios, etc.), de ahí la importancia de seleccionar cual comenzarás a leer. Dato: En español la más popular es la Reina-Valera en cada una de sus versiones. En el idioma inglés lo es la versión King James. “Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia” 2 Timoteo 3:16 RVR60
- Dedica un tiempo diario a esta actividad: Si eres primerizo puede que al principio sea un poco difícil, pero con el paso de los días necesitarás concluir la lectura del día anterior, lo cual será una motivación adicional. Comienza con un capítulo diario, puedes iniciar con los Evangelios, los 4 libros que se encuentran iniciando el Nuevo Testamento (Mateo, Marcos, Lucas y Juan). “Porque las cosas que se escribieron antes, para nuestra enseñanza se escribieron, a fin de que por la paciencia y la consolación de las Escrituras, tengamos esperanza” Romanos 15:4 RVR60. Ahora puedes buscar recursos o guías para llevar a cabo un plan de lectura constante de la Biblia, ¡Haz uso del que mejor se adapte a tus tiempos!
- Oración: Cita una frase “La Biblia es el único libro donde su autor, Dios, está presente cuando se lee”, ¡cuánta verdad! Al leer la Biblia nos encontramos nada menos que frente a su autor, el creador de la vida, Dios. La mejor forma de entender Su Palabra es teniendo una comunión previa con Él y eso se logra a través de la oración, hablar con Él antes de cada lectura nos hará tener una mejor comprensión y asimilación. “La exposición de tus palabras alumbra; hace entender a los simples” Salmos 119:130 RVR60
- Lee y analiza cada palabra: “Por lo demás hermanos, todo lo que es verdadero, todo lo honesto, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es de buen nombre; si hay virtud alguna, si algo digno de alabanza, en esto pensad” Filipenses 4:8 RVR60. Luego de comenzar, detente a analizar cada una de las palabras que lees, puedes encontrarte con palabras que tal vez no entiendas y te invito a tener a la mano libreta y bolígrafo para tomar nota. Escribir aquello que se te dificulta entender o las palabras claves de un capítulo te ayudará a averiguar y hacer consultas externas para que puedas tener un mejor entendimiento de ello. Escribe, escribe, escribe, ¡te sorprenderá todo lo que puedes aprender!
- Echemos un vistazo a las “curiosidades” de la Biblia: Sabias que en la Biblia encontrarás un sinfín de datos curiosos que estoy segura te asombraran en sobremanera, cada vez que leas la Biblia presta atención a todos los detalles del relato, descubrirás más de lo que te imaginas. ¡Y todos han estado ahí!
Como ejemplo te citaré populares refranes o frases que son utilizados diariamente y que tienen su variante directa en la Biblia:
- “Siembra vientos y cosecharas tempestades”. Oseas 8:7 NVI “Sembraron vientos y cosecharon torbellinos”.
- “Todo cae por su propio peso”. Proverbios 14:32 NVI “El malvado cae por su propia maldad”
- “Me lo dijo un pajarito”. Eclesiastés 10:20 RVR60 “…Porque las aves del cielo llevarán la voz, y las que tienen alas harán saber la palabra”
- “Todo lo mío es tuyo y lo tuyo mío”. Juan 17:10 RVR60 “y todo lo mío es tuyo, y lo tuyo mío; y he sido glorificado con ellos”
- “Manos a la obra”, frase realmente popular se encuentra no una sino 3 veces en la Biblia, 1 Crónicas 22:16, 1 Crónicas 28:20 y Esdras 10:4
¿Conoces a alguien que haga uso de alguna de estas frases? La próxima vez que escuches alguna puedes con total certeza decir que están haciendo referencia a la Biblia, ¿Qué tal? Estos son solo algunos dichos populares que tienen su origen en la Biblia, sin embargo, la Biblia sigue siendo un libro excepcional que espera ser descubierto. ¿Por qué descubierto? Te aseguro que aun cuando hayas leído una y otra vez la Biblia, cada vez encontrarás algo nuevo que terminará de maravillarte, y afirmo, cada vez y cada vez descubrirás pormenores o referencias nuevas adicionales a tu lectura anterior. Podría enlistarte muchas “curiosidades”, sin embargo, nada sería más gratificante que compartieras con nosotros lo que proyecte tu lectura diaria.
Eres tan afortunado de poder tener una Biblia y leerla sin sufrir algún tipo de persecución por solo poseerla. Seguro sabes que para que tuviéramos la Biblia hubo personas que estuvieron dispuestas a dar su vida. Aún en la actualidad hay lugares en el mundo en donde ser dueño de una amerita encarcelamiento o en un extremo más desolador, la muerte. Cuán afortunados somos que aún podemos darnos el lujo de elegir qué versión leer, tan afortunados que, si no poseemos los recursos para adquirir una Biblia física, la podemos tener en nuestras manos con solo un Click que descargue tan maravilloso compendio. ¡Sí! cualquier versión de la Biblia ahora está disponible digitalmente y puedes llevarla a cualquier lugar. Afortunado porque gracias a los medios digitales no sólo puedes tener la Biblia sino recursos edificantes que te ayuden a aprender. Hay cuentas en internet que sin duda pueden ser un apoyo en tu aprendizaje bíblico.
Y entonces,
¿Qué pasaría si de ahora en adelante te propones tener una lectura edificante y de enseñanza y valor eterno? “Escudriñar las Escrituras; porque a vosotros os parece que en ellas tenéis vida eterna; y ellas son las que dan testimonio de mí” Juan 5:39 RVR60
¿Qué pasaría si cada vez que lees alguna notificación del móvil también lees un versículo de la Biblia y lo memorizas a lo largo de ese día? “No solo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios” Mateo 4:4 RVR60
¿Qué pasaría si en tus tiempos libres, adicional al tiempo que hayas propuesto tener tu lectura, siguieras leyendo esta hermosa Palabra? “Fueron halladas tus palabras, y yo las comí, y tu palabra me fue por gozo y por alegría de mi corazón” Jeremías 15:16 RVR60
¿Qué pasaría si cada vez que lees anotas eso que te maraville o descubras? ¿Qué pasaría si comienzas a leer la Biblia hoy y dejas la excusa del mañana? “Cielo y tierra pasarán, pero mis palabras no pasarán” Mateo 24:35 RVR60
Hoy te animo a que comiences a conocer las Sagradas Escrituras, tienes todos los recursos para comenzar a hacerlo, así que ¡manos a la obra!
“Para que sean consolados sus corazones, unidos en amor, hasta alcanzar todas las riquezas de pleno entendimiento, a fin de conocer el misterio de Dios el Padre, y de Cristo, en quien están escondidos todos los tesoros de la sabiduría y del conocimiento.” Colosenses 2:3 RVR60
Pregunta: ¿Cuál ha sido tu experiencia en la lectura de la Biblia? Déjame un comentario presionando el botón.
Fotografía por Ben White en Unsplash